Los jueces hablan de excesos cometidos y muchos, pero pagan fatal las periciales, entre otras cosas porque no pagan ellos, y éstas suponen mucho trabajo y mal pagado en la mayoría de las ocasiones, con algunas excepciones evidentemente .Si quien paga es una AAPP en España, mi recomendación es mejor no aceptar el trabajo, ya que si logras cobrar lo harás mal pagado, pero muy mal, tarde (años) y mal retribuido, en la mayoría de las ocasiones no será rentable para buenos despachos
Dicho esto, está bien que haya muchos casos, el problema no es que no haya peritos, es que en España lo que no queremos los buenos profesionales es trabajar con ellos en esas condiciones: no es rentable, así de simple. La última pericial que hice, se me obligó a realizarla, quise renunciar TRES veces, no me lo permitieron y no quise entablar un procedimiento; no la he cobrado y, por supuesto, no creo que nunca la cobre y si la cobrara sería una completa pérdida económica para el despacho, de hecho es una pérdida económica desde un primer momento. En la mayoría de las ocasiones, como en más de un 70% de los casos, renuncio directamente, sin siquiera ver el caso, los menos, o una vez estudiado los autos, renuncio.
Esto mismo ocurrirá, me atrevo a decir que ya está ocurriendo hace algún tiempo, en Concursal (en realidad ya está pasando y ya ha pasado el umbral crítico de la rentabilidad, hay un punto en que deja de ser una actividad interesante profesionalmente, rentable, atractiva,... ), ya que al no haber querido regularlo, han creado tan mala imagen, que no paran de sentenciar en contra, aumentar el trabajo y la responsabilidad, disminuir la retribución, y ponerla en riesgo por preferencias de pago,...
Ser AC se ha convertido en una actividad de riesgo, repito, con mala imagen, mal retribuida, y que exige una necesaria especialización muy alta y muy difícil de ejercer (que hay que acompañar de nervios de acero, por las situaciones que se enfrentan, muchísima experiencia de campo, en términos jurídicos y económicos, hasta en los casos pequeños,...) y con prácticamente ninguna expectativa profesional de mejora, ... Además con la mejora de la situación económica general, surge trabajo en otras actividades, lo que es muy bueno y abre nuevas expectativas de trabajo.
En resumen como AC, cada vez estaremos menos, y los que estén, muchos de ellos serán incalificables (no tardarán más de dos años en volver a la cueva de donde salieron, de hecho ya muchos están cerrando). Como he dicho, es una actividad destinada a ser corroída por la degeneración, ya que cuando la situación económica de algo está en las condiciones descritas pero sigue existiendo solo puede ser o porque es ejercida por quien no tiene otra alternativa, por tanto es dudoso que sean buenos profesionales quienes se dediquen a ello, o porque la compensación obtenida por otros lados, compensa.
La economía de mercado es así, todo lo ajusta, por eso es la mejor manera de asignar recursos que se conoce, con sus problemas, como la democracia es la mejor forma de gobierno. Por tanto si disminuye el precio que se paga por un servicio, de una actividad profesional, por lógica disminuirá la oferta de profesionales ( el mercado de trabajo recuerdo funciona al contrario que el resto de mercados: la demanda son los empresarios, en este caso los jueces con sus designaciones, y la oferta los trabajadores, en este caso los profesionales que ejercen de AC) y cuando llega a un punto muy bajo de la curva, ya pocos la pueden ejercer rentablemente, has sacado a la mayoría de los profesionales, que a esos precios si ejercen pierden dinero, o los que están lo compensan por otras vías que distorsionan el mercado y la competencia.
Además, la retribución de actividades con mucho riesgo debe aumentar, el riesgo demanda más precio para compensar dicho riesgo, que en los profesionales se verá reflejado en el precio de la prima de la póliza del seguro de responsabilidad civil por el ejercicio de dicha profesión (como los intereses que se piden por comprar deuda, cuanto más riesgo tiene la deuda que se emite, más intereses pedirá el comprador, es el binomio de interés y riesgo).
En España las AAPP, Gobierno, grandes despachos y consultoras (que les han vendido esa idea, son los únicos que ganan con ello, entre otros, muchos ex jueces que se han ido a hacer dinero a grandes despachos, a los departamentos de Concursal, mejor dicho de acuerdos de refinanciación) y los jueces desde su posición, emiten sus sentencias, dictadas desde la comodidad de la distancia, sin riesgo prácticamente y abstraídos en la mayoría de las ocasiones de la realidad empresarial, y mucho más de la profesional.
Así es esto y hay que entenderlo, no se pueden destinar recursos a actividades que se convierten en no rentables y muy arriesgadas, el precio que se obtiene para ese recurso, a ese riesgo, no es rentable, al menos en nuestra opinión, ya que hay profesionales que si pueden trabajar a ese precio (como digo poco expertos, o que lo compensan de otras formas).
Y todo esto es imputable, en una alta medida, a los jueces, Gobierno, AEAT, TGSS, grandes despachos y bancos que han apostado por tener una AC no profesionalizada y sin medios, vamos que no pueda ser independiente y altamente cualificada, como se requeriría en el sistema español. Pero también ha habido mucha responsabilidad por parte de los AC, no tengo duda, pues creo que después de lo que hemos visto en los últimos tres o cuatro años y de una caída de más del 50% del mercado por el ciclo económico (era previsible y normal), creo que el ajuste se ha pagado con creces por la parte que ha correspondido a la responsabilidad de los AC.
De esta forma los jueces, pueden hacer lo que les de la gana, sin control de un incómodo AC, en sus acuerdos de refinanciación tipo Abengoa (no merece comentario, ya lo comenta toda Europa como ejemplo de lo que hacen LOS ESPAÑOLES,... una empresa en un proceso de refinanciación de casi un año, un estigma que duda cabe), y los que vendrán; se saca todo lo que tenga valor, o su mayor parte, de la empresa en una acuerdo de refinanciación, y a los dos, tres o cuatro años de deja el esqueleto pelado en un juzgado en un concurso (las sociedades que se consideren).
Eso sí, los bancos se han llevado los mejores activos por sus créditos ( lógico defienden sus intereses sin límites), grandes consultoras y despachos han obtenido unos honorarios excelentes sin control alguno (en Abengoa uno de los asesores solo 6 M de €, al que habría que sumar abogados, procuradores,... seguro que decenas, por cierto ninguno sería una AC, o lo es en sus ratos libres, esa es otra cuestión en la que no entro) , la AEAT habrá obtenido lo que haya podido, quizás no tanto, también la TGSS, aunque en este caso lo dudo porque le dejaran el paquete laboral, junto con el Fogasa y claro los proveedores ordinarios, sin voz ni voto, o habrán ido a concurso como consecuencia de dicho acuerdo abusivo de refinanciación (efecto dominó que pagan los pequeños acreedores) o irán al concurso final donde no habrá nada, pero bueno es lo que hay.
Todo ello sin el control, por supuesto indeseable de una AC, que sería un incordio y además los AC decentes y profesionales, que claro que los había y hay, cada vez menos, tuvieron la costumbre de pelear, reintegrar a bancos, quitar tarjetas de gastos, coches, seguros de vida estrambóticos, limitar salarios,... a directivos y socios de empresas en reestructuración, pleitearon con AEAT, TGSS, Fogasa, controlaron las retribuciones de los abogados y consultores, moderándolas en muchos casos, y encima en la pieza de culpabilidad declararon culpable el concurso y designaron afectados. Todo esto que manifiesto, lo he hecho con frecuencia, se han querellado contra mi (gracias a Dios ni admitidas a trámite, y archivadas), me han demandado (todos los casos ganados), han pedido mi cese ( nunca me han cesado pero he tenido que demostrar mi diligencia),... me han presionado por todos lados y de todas las maneras posibles, llegas a coger cierto hábito, pero creo que nunca te acostumbras del todo
Así son las cosas, yo suelo decirlas con años de anticipación, nadie suele escuchar, suelo tener por costumbre virar el timón también con tiempo, lo que no es ni mucho menos sencillo porque lleva años y cuesta mucho esfuerzo y te produce pena y pérdidas, abandonar aquello que te gustaba y para lo que dedicaste mucho esfuerzo personal de formación, de tus compañeros del despacho,...
Y no es porque la actividad disminuya, eso es normal, va con el ciclo económico y es así en todos los países, es que todo a la vez es demasiado y porque ya dejó de ser rentable, así de simple, y nosotros no dejamos de ser despachos que debemos buscar la rentabilidad, combinada con actividades de las que sepamos y podamos ejercer y hacerlo bien y eso lleva años..
Lógicamente en todos los países que conozco, sobre todo Alemania y UK, se ha producido una situación de profunda disminución del trabajo de los AC, pero partían de otro mundo retributivo, muchísimo más alto y rentable en términos comparables, y de consideración profesional, nunca es excelente al asociarse esta profesión a la crisis empresarial, pero no lo que ocurre en España, además de muchas exigencias.
Lo que nunca he visto es destruir a una profesión con tanto esmero, con la ayuda de los propios jueces de primera instancia, audiencias y en particular en el Tribunal Supremo (eso ha sido lo último, quizás ya no se esperaba pero bueno ya sabes: ! A perro flaco todo le son pulgas!); se supone que éramos sus auxiliares y un órgano previsto en la propia AC, al que se debía dotar de independencia y medios.
La degeneración abyecta y corrupta de algunos compañeros, los menos, pudo producir una mala sensación; la estupidez egoísta y con búsqueda de la fama por un día a la que, como dijo Andy W, todo el mundo tiene derecho,... de otros.
Si pero en realidad lo que ha convertido esta profesión en impracticable en España, en comparación a los países del entorno europeo, es su destrucción a conciencia, consentida por los jueces, no solo consentida sino que han colaborado con ello con ahínco, el Ministerio de Justicia, con saña especial el Ministerio de Economía (y me duele especialmente como economista su ignorancia), y los grandes despachos y bancos, estos era normal porque defendían sus intereses, e increíblemente aquellos que, aunque no se dieran cuenta, se beneficiaron bien de ella, el Fogasa y la TGSS, especialmente la TGSS en su profunda ignorancia guiada por sus agobios financieros.
Pero hemos llegado donde hemos llegado y lo mejor es sin desorden, sin aspavientos y ni mirar atrás, abandonarlo en España y como dijo el poeta: caminante no hay camino, se hace camino al andar,... y el cantante añadió y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar.