GEM-Global Entrepreneurship Monitor, es un observatorio mundial que realiza informes sobre la actividad emprendedora desde 1999. Los estudios y análisis correspondientes a Aragón, los confecciona la Universidad de Zaragoza. Concretamente el Grupo de Investigación Generés, dirigido por el profesor D. Lucio Fuentelsaz Lamata.
GEM-Aragón, entiende que la decisión de poner en marcha una iniciativa emprendedora no es fácil. La consideración de esa iniciativa como una ilusión, un proyecto de futuro y una forma de desarrollo profesional y personal podría permitir vencer esos miedos y dar como resultado la creación de una empresa. Fundamentalmente los tipos de motivaciones para comenzar una actividad: Detección y aprovechamiento de una oportunidad, o como respuesta a una necesidad.
Define el emprendimiento como un proceso que se inicia con la generación de una idea (emprendedor potencial), continúa con las acciones de su puesta en marcha (iniciativa naciente), se lanza al mercado (iniciativa nueva) y entra en una fase de consolidación cuando sobrevive más de tres años y medio (iniciativa consolidada).
Si accedemos al citado estudio GEM-Aragón 2014 (último año publicado), la edad media del emprendedor aragonés es de 42 años, y con estudios universitarios el 40% de los emprendedores. Le sigue en importancia quienes tienen formación de primaria (24%), secundaria (19%) y de FP (17%). Respecto a la formación específica en emprendimiento, destacan los que han recibido ésta formación (55%) frente a los que no han recibido formación específica (45%).
La TEA (tasa de actividad emprendedora) de Aragón fue en 2014 del 4,7%. Mide el número de emprendedores sobre la población total. Se encuentra relativamente próximo, aunque por debajo, a la media nacional (5,5%). El porcentaje de iniciativas promovidas por hombres es del 57%, frente al 43% que son promovidas por mujeres El porcentaje de desempleados supone un 25% del total de emprendedores. La tasa de emprendimiento juvenil es superior a la adulta.
Las personas ocupadas en proyectos emprendedores en Aragón, asciende a 134.000. Aproximadamente la mitad involucradas en iniciativas nacientes, y la otra mitad en proyectos consolidados (con vida superior a 42 meses).
Por lo que respecta al capital que aporta el propio emprendedor la media es de 7.988 euros, con una total inversión media de 39.190 euros. También interesante observar que los emprendedores aragoneses que recurren a financiación externa están aportando, por término medio alrededor del 49% del capital necesario. No obstante, un 41% del colectivo asume toda la inversión necesaria.
Más de la mitad de los proyectos concretamente el 53%, están orientados hacia el sector servicios/consumo. El 20% dirige su actividad a la prestación de servicios a las empresas. El 17% crean empresas que operan en el sector industrial/transformador y el 6% en el sector primario/extractivo. La competitividad, la innovación y la internacionalización, constituyen factores que caracterizan el potencial del emprendimiento aragonés. Y también destaca la amplia utilización de las nuevas tecnologías.
Referente a los ingresos que obtenían los emprendedores, el grupo más representativo es el constituido por los emprendedores con ingresos entre 10.000 y 20.000 euros (40%). Le sigue el grupo de ingresos entre 20.001 y 30.000 euros (18%). Entre 30.001-40.000 euros el 12%. Completa el porcentaje, el grupo con otros ingresos.
Respecto al empleo generado, un 37% de las iniciativas ocupa únicamente al promotor de la iniciativa, un 51% emplean entre 1 y 5 trabajadores y un 10% están entre 6 y 19 empleados. La cuota de iniciativas con más de 20 asalariados es del 2%.
La población rural se muestra más activa en términos de emprendimiento que la urbana 60% frente a un 40%. El emprendimiento rural supone una importante contribución social y económica en sus correspondientes zonas. Asimismo muestra una mayor estabilidad, en la medida en que es mayor el porcentaje de empresas que se consolidan y el cierre efectivo de negocios es inferior al registrado en los núcleos urbanos. La valoración social de la actividad emprendedora es superior en las zonas rurales, donde se percibe a los emprendedores con reconocimiento social.
Según conclusión del citado estudio (apartado que ha contado con la colaboración de expertos), los principales obstáculos para emprender, son: Falta de formación empresarial, miedo al fracaso, falta de cultura emprendedora, la financiación, y la situación de crisis económica. Los apoyos que se consideran convenientes, son: Ayudas y subvenciones, redes de business angels, mejora de la formación y existencia de viveros de empresas. Y recomienda fomentar una mayor formación emprendedora, fomento de la cultura empresarial, conexión Universidad-Empresa y programas de apoyo al emprendimiento.
En mi opinión, un punto a potenciar es el de la “Ley de segunda oportunidad“; que un fracaso, no impida emprender un nuevo proyecto. Medidas para mejorar el ratio de empresas con supervivencia superior a los 3,5 años. Promover acciones, que fomenten el crecimiento del tamaño de las empresas. Asimismo, debería potenciarse el emprendimiento social.
Exponer que al citado Informe, puede accederse directamente al enlace GEM España, o a través del portal Aragón Emprende. Recomendable acceder a Estrategia Aragonesa de Emprendimiento 2015/2020.
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