viernes. 29.03.2024

A lo largo del tiempo; los emprendedores y las industrias oleicolas

La noticia de que el Proyecto APADRINA UN OLIVO, en Oliete (Teruel), fue seleccionado en el Programa de emprendimiento social de una de las primeras entidades financieras españolas “por tratarse de una  primera línea de negocio.

Dentro de una entidad existente, “Asociación para la recuperación de Olivos yermos de Oliete” ( entre 20 finalistas de los 299 proyectos presentados) con el objetivo de poner en producción el Olivar, recolectar su fruto, elaborar el aceite de oliva, envasarlo bajo marca y comercializarlo en D.O., invita a reflexionar  sobre otra noticia muy reciente:”Las exportaciones aragonesas apuntan a batir record histórico del año pasado(2015)”, por ende la industria agropecuaria, nuevamente es noticia y esta vez vinculada al movimiento “emprendedor” (empresariado, relativamente joven, que opta por el autoempleo individualmente o a través de las distintas formulas asociativas).

El premio obtenido consiste en una ayuda dineraria, formación por IESE Business School  y la disposición de un Mentor que, durante un año, acompañara a los emprendedores/empresarios en la toma de decisiones y les proporcionará contactos para asegurar la continuidad de la iniciativa, opino entre ellas la de estudiar la posibilidad de exportar sus productos. Hay empresarios que son proactivos y a la vez lideres, dos actitudes  necesarias al emprendedor/empresario.

Existen variedad de estudios del “liderazgo”, al emprendedor/empresario aragonés se le suponen las capacidades propias del director de empresa y últimamente, la adopción de un “liderazgo compartido” en pro de nuevas estrategias que abandonan el criterio único  abogando por el criterio plural.

Ya a mediados de 2014 fue noticia un grupo de emprendedores en el municipio aragonés de Oliete: “OLIETE QUIERE RECUPERAR MAS DE 1.500 OLIVOS YERMOS”: Oliete, situado en la Provincia de Teruel (Comarca de Andorra-Sierra de Arcos) en la ladera norte de la Sierra de los moros a una altitud de 541 metros, junto al rio Martin (afluente del Ebro) censó en 2014 una población de 479 habitantes (en 1900, 2146 y en 1950, 1943 habitantes); en el espacio 2003 a 2007 las zonas predominantemente rurales en España perdieron hasta un 15,16 % de su población.

Oliete, en su economía rural, cuenta con Olivos, cereales, frutales, ganadería ovina y yacimientos de arcilla; forma parte de una zona de producción agrícola que cuenta con productos que sobresalen por su calidad: aceite de oliva virgen extra, jamón y melocotón que comercializa con etiqueta de calidad y bajo Denominación de origen: “Aceite del Bajo Aragón”, “Jamón de Teruel” y “Melocotón de Calanda”. Todas sus actividades sujetas a las distintas normativas aplicables. La zona del “Bajo Aragón” ha sido muy afectada por el éxodo rural, por motivos de todos conocidos a los que hay que añadir, actualmente alguna inversiones en mecanización e incluso en nuevas tecnologías.

“Lo sorprendente y esperanzador de la agricultura española es que, a pesar de las tan delirantes, variantes y contradictorias normativas a las que ha sido sometidas a lo largo de su historia, todavía siga siendo un sector con capacidad de creación de empleo e innovación en aquellas áreas en las que la legislación le ha dejado un poco de libertad para desarrollarse. Y es que en aquellos productos en los que se genera un mayor valor añadido y se produce una diferenciación por calidad o singularización el sector agropecuario español logra altas rentabilidades y productividad. (1).

El olivo es una producción típica española y últimamente ha conseguido superar, en parte, uno de los problemas referido a la falta de mecanización y automatización, requiere un fuerte contingente de mano de obra, lo que ha hecho desaparecer algunas plantaciones por su falta de rentabilidad. El aceite de oliva tiene sus principales productores, a nivel mundial, en  Italia y España, siendo la demanda, en los mercados internacionales muy importante y la exportación significativa hacia Italia y China. (1)

 He citado la exportación de productos aragoneses y el “record histórico del año 2015”, si añadimos los imperativos de la globalización de los mercados y la tendencia marcada por los tres primeros trimestres del año en curso, incluso las previsiones para el último trimestre, 2016 cerrará balances con cifras muy positivas (según avances estadísticos, por encima de los 10.567 millones de euros, cifrados en 2015).

Organismos como el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón, CITA,  vienen colaborando en proyectos conducentes a importantes mejoras en producciones como la que se está comentando, al igual que asociaciones para el desarrollo, en este caso la de Desarrollo Integral del Bajo Martin y Andorra-Sierra de Arcos.  Como he citado, en el año 2015,  se inyecto  más capital en las explotaciones agrarias, aumentando con ello su productividad su rentabilidad y por ello la generación de empleo..

Volviendo al tipo de empresa, opino que la asociativa es la que debe de adoptar una explotación de tipo agrícola-industrial para lograr las producciones necesarias a un proyecto rentable y socialmente sostenible. Un proyecto como el comentado que necesita aumentar sus probabilidades de éxito como tal proyecto emprendedor, teniendo en cuenta las altísimas tasas de supervivencia (situadas en un 79,9% al cabo de 1 año) precisará del apoyo no solo de las entidades financieras, también  del Gobierno de Aragón sin renunciar al máximo espacio para su desarrollo como iniciativa privada.

A lo largo del tiempo; los emprendedores y las industrias oleicolas