Ibercaja ha presentado hoy el número 60 de la revista Economía Aragonesa, en el que eleva su previsión de crecimiento del PIB aragonés al 3,1% para 2016 y al 2,9% para 2017, que mejoran las vigentes en el número anterior en una y tres décimas, respectivamente.
Así lo ha expuesto en la rueda de prensa de presentación, el director financiero de Ibercaja, Antonio Martínez, quien ha comparecido junto a los autores de los artículos monográficos: Miguel Ángel Vázquez, responsable de Estudios de UNESPA; Eduardo Sanz, economista del Servicio de Estudios de la Fundación Basilio Paraíso; y José Francisco García, consultor.
Martinez ha subrayado que “contamos con más capacidad competitiva y un sector privado menos endeudado; creemos que el “círculo virtuoso” de inversión, empleo, consumo, aumento de la facturación, inversión, empleo, consumo, etc. se ha activado y es muy sólido, porque ha superado incluso casi un año con un Gobierno en funciones en España”.
Antonio Lacoma, director territorial de Ibercaja en Aragón, ha reforzado también estas expectativas positivas para la economía regional en la clausura del acto público de presentación de la publicación que ha tenido lugar igualmente esta mañana en la sede central de Ibercaja en Zaragoza. A este acto han asistido más de 150 empresarios, directivos, profesionales y representantes de diferentes estamentos públicos.
COYUNTURA ECONÓMICA: SÓLIDA RECUPERACIÓN TRAS LA GRAN CRISIS
Ibercaja efectúa en esta edición de la publicación una estimación del crecimiento del PIB de Aragón para 2017, situándolo en el 2,9%, tres décimas por encima de su previsión anterior y dos décimas por encima del promedio esperado para la media española (2,7%).
Asimismo, en línea con las previsiones de otras instituciones, el Banco anticipa un crecimiento mayor para el agregado de 2016, ubicándolo en el 3,1%, lo que supone una revisión al alza desde el 3% anterior, una décima inferior al que se estima para el promedio nacional (3,2%) para este ejercicio.
Estas previsiones evidencian que la recuperación económica aragonesa continúa y es generalizada, a pesar de que está siendo algo inferior a la del conjunto de España en los últimos trimestres. Aunque la evolución dependerá del ciclo de la industria, la Entidad considera sólida la posición de la economía aragonesa. En cualquiera de los escenarios posibles, las tasas de crecimiento permitirán seguir reduciendo el nivel de desempleo en los próximos meses.
A escala global, el crecimiento de la economía sostiene un ritmo razonable en las potencias avanzadas y se mantienen proyecciones positivas también para los países emergentes. Mientras, la evolución de los precios empieza a ofrecer signos de cambio de ciclo, acercándose el final del período deflacionista propiciado por los bajos precios del petróleo y de otras materias primas básicas durante los dos años pasados. Este nuevo contexto de comportamiento de los precios podría propiciar un giro en las hasta ahora muy expansivas políticas monetarias aplicadas por los principales bancos centrales, lo que activaría un proceso gradual de subida en los tipos de interés.