El Gobierno de Aragón, a través del Instituto Aragonés de Fomento (IAF), ha presentado este lunes el Plan de Responsabilidad Social de Aragón, el cual reconocerá y premiará a las empresas y autónomos comprometidos con la Responsabilidad Social Empresarial. Este proyecto ha sido impulsado conjuntamente con las organizaciones empresariales CREA y Cepyme-Aragón y los sindicatos UGT y CC.OO. Los encargados de presentar y firmar este plan ante empresarios y representantes de los sindicatos han sido el presidente del Ejecutivo aragonés, Javier Lambán, y la consejera de Economía e Industria del Gobierno autonómico, Marta Gastón.
El órgano que coordinará este acuerdo será una Mesa para la Responsabilidad Social, que se creará para divulgar los valores de la conciliación laboral, del derecho al trabajo, el trabajo digno y la sostenibilidad medioambiental. El plan engloba a todas las empresas, autónomos, pymes e instituciones de la Comunidad, tanto a aquellos que ya están comprometidos con la Responsabilidad Social como a los que no lo estén aún y con independencia de su actividad y de su tamaño. Además, el Ejecutivo aragonés creará un sello para reconocer a las empresas que destaquen en la práctica de estos valores. Por último, se premiará y favorecerá a las compañías que asuman estas prácticas en los procesos de contratación públicos.
"Se trata de que, poco a poco, la legislación mida el cumplimiento de estos principios para que quienes los cumplan reciban el premio correspondiente a la hora de acceder a la contratación de servicios públicos", ha expresado Lambán. El plan también pretende "crear hábitos entre los consumidores para que la sociedad penalice a quien incumpla con los valores de la Responsabilidad Social", ha apuntado el presidente del Gobierno aragonés.
Así, el plan persigue tres objetivos: que autónomos y empresas fortalezcan su compromiso con la Responsabilidad Social, impulsar un enfoque estratégico sobre las políticas, productos y acciones en la Comunidad y, también, generar de forma colectiva un impacto social más sostenible, aportando valor añadido a la marca Aragón.
La consejera de Economía e Industria ha alegado que “adoptar este tipo de prácticas reportará a las empresas y autónomos una serie de beneficios directos, como la mejora de su imagen y reputación”. Asimismo, ha indicado que con ellas “lograrán fidelizar clientes y ganar otros nuevos y contribuirán al desarrollo sostenible y a la mejora de la sociedad”.
El compromiso se evaluará, en el caso de autónomos y micropymes, valorando seis parámetros: la calidad, su fiscalidad, el impacto medioambiental, la igualdad y el empleo. Por su parte, las pymes y grandes compañías deberán presentar un informe anual sobre cómo han aplicado la Responsabilidad Social.
El plan tiene varias fases: adhesión, formación especializada, asesoramiento, autodiagnóstico, difusión y sensibilización y, por último, reconocimiento público, distinguiendo a las compañías que destaquen con el sello de oro a la Responsabilidad Social.
El Ejecutivo autonómico asumirá cuatro roles en el marco de este plan: como regulador que desarrolle la legislación que permita fomentar la Responsabilidad Social; como facilitador de acciones y premiando a quienes apuesten por estos valores; sensibilizando a la opinión pública, e implantando medidas como la puesta en marcha del Observatorio de la Responsabilidad Social.
