Ibercaja potencia su Banca Privada y pasará a gestionar 9.300 millones de euros de 12.500 clientes al finalizar 2018. Un ambicioso objetivo que supone duplicar las cifras de cierre del 2016 de 4.000 millones de euros y de 5.000 clientes.
Uno de los motivos de este crecimiento se debe a la reasignación de los clientes con un ahorro superior a 300.000 euros. El resto provendrá de nuevos clientes, de los que más del 80% procederán de Madrid, Levante, Burgos y Cataluña.
Para conseguir este objetivo, Ibercaja está impulsando la competitividad en el mercado de este segmento estratégico a través de distintas acciones como la creación de un modelo organizativo más eficiente (con la integración de Ibercaja Patrimonios en la estructura del Banco), la aplicación en este segmento del consolidado modelo comercial y la definición de la nueva propuesta de valor al cliente.
En esta nueva estructura, el banco va a incorporar en su red a Ibercaja Patrimonios, Sociedad Gestora de Carteras, lo que se materializará en redes gestoras de los segmentos de Banca Personal y Banca de Empresas, así como compartir y aprovechar plenamente el resto de soportes clave para el negocio de la Entidad como son la tecnología, la sistemática comercial y la imagen de marca, entre otros.
Además, el número de gestores para esta línea de negocio aumentará hasta en 78 a finales de 2018. Un equipo de profesionales que va a trabajar bajo el modelo comercial de relación global con el cliente.
Mediante este nuevo modelo organizativo, la entidad financiera aragonesa va a ofrecer al cliente una propuesta de valor basada en un servicio financiero de alto valor, con una gestión especializada y personalizada, una amplia oferta de productos competitivos y el asesoramiento fiscal.
